Brandy Ximénez Spínola Tres Mil Botellas [700ml]

"La plenitud de un perfume que se bebe…” Concentrar los sabores y aromas de un vino puede ser entendido como el anhelo de todo viticultor. Destilar su esencia misma, es un placer mayor aún que el de la propia fermentación. Por eso desde 1948 este Brandy está considerado un perfume que se puede beber.

En nariz revela notas de pasificación, así como con recuerdos a maderas nobles, ebanistería y fondo de Solera vieja. Perfumado sin cansar en nariz y gratamente apetecible. En boca es muy redondo, placentero, profundamente aterciopelado y con una sutil dulcedumbre que recuerda tanto a la materia prima, como a las barricas en las que ha envejecido. La fase retro-nasal es de absoluta plenitud, con una intensidad de postgusto muy prolongada. Reporta una placentera percepción sensorial muy larga y absolutamente inolvidable.